Tiempo de preparación: 1 hora más tiempo de refrigeración

Porciones: 10 a 12

Dificultad: fácil

La cajeta no sólo se disfruta en un pan o con galletas, hoy te comparto un uso aún más delicioso que se fusiona con la frescura del queso y como resultado tendrás un postre para deleite de chicos y grandes.

Compártela después de comer con toda la familia o bien, ten esta gelatina en el refrigerador para aquellas visitas inesperadas.

 

Para la gelatina de queso:

90 gr. de queso crema

½ taza de leche condensada

½ taza de agua

1 ½ cdas. de grenetina

¼ de taza de nuez picada

 

Para la gelatina de cajeta

2 tazas de leche

15 bombones blancos

½ taza de agua

2 cdas de grenetina

1 lata de leche evaporada

400 gr de cajeta

 

Preparación:

 

Gelatina de queso

 

-Espolvorea la grenetina en el agua fría, dejar reposar hasta que hinche, mientras tanto licuar el queso con la leche condensada. Hasta que se hayan incorporado.

-Calentar la grenetina en el horno de microondas o a baño maría cuando haya esponjado, revolver hasta que se disuelva perfectamente.

-Dejar enfriar un poco y verter en la licuadora, mezclar y vaciar en un molde para gelatina hasta llenar una cuarta parte del molde, reservar el resto.

-Espolvorear las nueces picadas y refrigerar hasta que semicuaje.

 

Gelatina de cajeta

 

-Calentar la leche en un tazón a baño maría con los bombones hasta que se derritan. Mientras tanto hidratar la grenetina en el agua, dejar reposar hasta que hinche, cuando esté lista, calentar a baño maría o en el microondas.

-Vertir en el tazón con la leche, añadir la cajeta, la leche evaporada y lo que sobró de la gelatina de queso.

-Mezclar perfectamente hasta que todos los ingredientes estén incorporados.

-Retira del baño maría y deja enfriar.

-Vaciar esta gelatina sobre la de queso y refrigerar hasta que cuaje por completo, mínimo cinco horas.

-Desmoldar y servir.